
Históricamente en México, en los juicios de carácter laboral, la conciliación ha sido la mejor forma de solucionar los conflictos, independientemente de la instancia o el estado procesal, ya que este medio alterno se realizaba desde forma privada, como en los organismos públicos como las Procuradurías de la defensa de derechos laborales, y ya estando en juicio, la conciliación formaba etapa previa entablar la litis.
Dados los resultados de la conciliación, se estableció en el nuevo modelo de justicia laboral como parte medular, obligatorio y previo a acudir con los Tribunales Laborales, por ello actualmente se le denomina CONCILIACIÓN PREJUDICIAL.
¿Qué es la Conciliación Prejudicial?
La conciliación prejudicial en materia laboral es un proceso fundamental en la resolución de conflictos entre trabajadores y patrones en el ámbito laboral. Es un mecanismo legal que permite a las partes involucradas en una disputa intentar resolver sus diferencias antes de recurrir a los tribunales.
En el NSJL lo entendemos como un proceso mediante el cual las partes en conflicto buscan una solución mutuamente beneficiosa con la ayuda de un tercero imparcial, conocido como el conciliador. Conciliar es voluntario, pero agotar el proceso es obligatorio y se realiza antes de presentar una demanda ante un Tribunal Laboral. Su objetivo principal es evitar un costoso y prolongado litigio y promover la resolución pacífica de disputas.

¿Cómo Funciona la Conciliación Prejudicial en Materia Laboral?
El proceso de conciliación prejudicial en casos laborales generalmente sigue estos pasos:
Solicitud de Conciliación: El trabajador o el patrón que busca resolver una disputa laboral presenta una solicitud de conciliación ante el centro de conciliación correspondiente. Esta solicitud debe incluir información esencial, como los nombres de las partes involucradas, sus identificaciones oficiales y los detalles del conflicto.
Asignación de Conciliador: El centro de conciliación asigna a un conciliador imparcial que actúa como facilitador del proceso. El conciliador es un profesional capacitado en resolución de conflictos y conocedor de las leyes laborales.
Audiencia de Conciliación: Se programa una audiencia de conciliación en la que las partes involucradas se reúnen con el conciliador para discutir el conflicto y buscar posibles soluciones. Durante esta audiencia, se alienta a ambas partes a expresar sus preocupaciones y a trabajar juntas para encontrar un acuerdo.
Negociación y Acuerdo: Si las partes llegan a un acuerdo durante la audiencia de conciliación, este se formaliza por escrito. El convenio debe detallar los términos y condiciones del acuerdo, y las partes deben ratificarlo antes de finalizar la audiencia.
Constancia de NO Conciliación: En caso de que no se alcance un acuerdo o haya sido posible notificar al patrón, se emite una constancia de haber agotado la conciliación prejudicial pero que no se logró concluir el conflicto en aquella etapa. Esta constancia es un requisito para presentar una demanda laboral ante los Tribunales Laborales.

Importancia de la Conciliación Prejudicial en Materia Laboral
La conciliación prejudicial ofrece varios beneficios importantes:
Ahorro de Tiempo y Costos: Al resolver conflictos de manera anticipada, se evitan los largos procedimientos judiciales y los costos asociados, como honorarios de abogados y gastos judiciales.
Confidencialidad: Las discusiones en el proceso de conciliación son confidenciales, lo que permite a las partes abordar sus preocupaciones de manera más abierta y sin temor a que se divulguen públicamente y sobre todo, lo que se conozca en el centro de conciliación no puede ser usado como prueba en el eventual juicio.
Control de las Soluciones: Las partes tienen un mayor control sobre las soluciones que se proponen y pueden personalizar los acuerdos según sus necesidades y circunstancias específicas.
Preservación de Relaciones: La conciliación puede ayudar a preservar las relaciones laborales al permitir que las partes trabajen juntas para encontrar una solución mutuamente aceptable.
La conciliación prejudicial en materia laboral es un mecanismo valioso para resolver disputas de manera eficiente y efectiva. Permite a las partes buscar soluciones colaborativas antes de recurrir a un litigio costoso y prolongado. Al comprender este proceso y sus beneficios, las partes involucradas en conflictos laborales pueden tomar decisiones informadas sobre cómo abordar sus diferencias de manera más efectiva.
No sobra decir que por ello los Tribunales que se encargaban de la importación de justicia se les denomina “Junta de Conciliación y Arbitraje”, en el entendido de que si fracasaba la conciliación, se procedía al arbitraje, sin perjuicio de poder concluir el procedimiento por la vía de conciliación en cualquier etapa del juicio.

